Liderazgo humanista

2021 pide energía a sus líderes. Energía para crear un futuro optimista e innovador sobre una base realista de retos y capacidades. Los líderes deben combinar el cuidar a las personas, fatigadas por un largo año de Covid, con un plan de trabajo sensato y flexible a los cambios. ¿La clave? Comunicación continua y un clima de confianza.

McKinsey & Company lo deja claro en su artículo Overcoming pandemic fatigue: los nuevos comportamientos de los consumidores, modelos de negocio, formas de trabajar surgidos a partir de la pandemia, van a ser permanentes. Ha nacido una nueva sociedad.

En 2020 aprendimos a tomar rápidas decisiones en escenarios inciertos, a eliminar burocracia innecesaria, a renovar modelos de trabajo y a digitalizarse. Las empresas se han visto obligadas a organizarse de manera diferente.

Más que nunca es necesario ahora despertar el potencial de las personas para impulsar, a partir de lo aprendido, un proyecto de futuro. Mientras se cuidan sus necesidades personales frente al pesimismo, al exceso de presión… Es momento de escuchar, de empoderar, de cultivar relaciones de calidad entre los equipos.

Un año difícil y estimulante

El estudio publicado en theconversation.com afirma que durante el 2020 se ha aprendido a:

• Mantener una comunicación transparente y regular en todos los niveles de la empresa -incluso sin filtros-, para informar de las medidas de prevención y para asegurar la eficacia de la organización. Pregúntate: ¿ha variado el número de personas con las que te comunicas hoy? ¿ha mejorado el tiempo y la calidad de tus reuniones?
• A salir de la zona de confort, lidiar con el exceso de trabajo y con el estrés continuo. ¿Qué ha pasado con tu forma habitual de trabajar?
• Redescubrir a los empleados, su autonomía y su creatividad. Se han desarrollado las habilidades relacionales y de organización, la confianza recíproca entre personas.
• Reforzar el sentimiento de pertenencia a una empresa y a un equipo, al haber superado juntos dificultades y construido juntos soluciones. ¡Cuántas ganas hay de algo tan sencillo como tomar un café y unas cuantas bromas por la mañana!
• Reinventar la atención al cliente, con un trato más humano: ¿habías imaginado que llegarías a resolver problemas de tus clientes por videoconferencia?

“Ha sido un año difícil pero que me ha aportado muchas cosas”, dice uno de los entrevistados en este estudio.

Ahora toca capitalizar estas experiencias. Y este reto tiene un nombre: “humanocracia”. Empresas intensamente humanas, centradas en conectar personas, fomentar la creatividad y la empatía, mediante un nuevo estilo de liderazgo humanista.

¿Qué es un líder humanista?

El líder humanista persigue la felicidad de su equipo.

Ahora nos sabemos vulnerables. De aparentar ser infalibles hemos pasado a permitirnos pedir, mostrarnos cansados, desmoralizados. El cuidado y la salud del equipo es máxima prioridad. Si las habilidades personales ya ganaban protagonismo junto a las técnicas en un proceso de selección, ahora son claves. Es más importante que nunca que un nuevo/a empleado/a encaje con el proyecto.

2020 ha visto grandes mensajes inspiracionales de líderes para demostrar a sus equipos que iban a salir con éxito de la nueva situación.

Realismo versus Optimismo

Los líderes optimistas ofrecen luz en el túnel y un motivo por el que esforzarse. Mientras exploran a fondo el terreno que pisan, sus dificultades y sus posibilidades. Saben que hay cansancio y desesperanza después de un esfuerzo tan prolongado. Por eso son capaces de diseñar un poderoso reto y de hablar con un miembro de su equipo de problemas personales.

Capacidad de escucha

Ahora que sabemos que podemos trabajar en equipo con autonomía, es el momento de desarrollar habilidades personales que lo consoliden: la paciencia, la escucha sin juicio, abrirse a entender otros puntos de vista, tolerancia hacia otras formas de actuar… Recordarse que cada uno lo hace lo mejor que puede y que el objetivo es ver las cosas de forma amplia y buscar juntos soluciones. Además de encontrarse a gusto entre personas, claro.

Aprendizaje entre pares

Si hace unos años parecía que los líderes eran seres solitarios y visionarios, hoy está demostrado que, si no se ofrecen espacios de inteligencia colectiva como el codesarrollo profesional, es muy complicado que surjan soluciones nuevas, que van más allá de la inteligencia y el individualismo. Y entendemos por codesarrollo profesional que cada persona con su reto comparta sus inquietudes y reciba consejo para elaborar la mejor hoja de ruta hacia su solución, sea entre profesionales de la empresa, o entre personas de otras organizaciones y culturas.

Depende de cada uno de nosotros

Hace unos días preguntamos a un carismático líder de una empresa tecnológica qué pasos daría para desarrollar un liderazgo humanista en una organización y su respuesta fue clara: seleccionar las personas más adecuadas, desarrollarlas y confiar en ellas. Identificar las dotes humanas de las personas, sostenerlas y mantenerlas en el tiempo es el gran reto de las organizaciones actuales.

Xavier Gómez- Aparicio, exdirectivo de HP, nos cuenta que, tras un cambio profesional, sintió que había dejado huella cuando de vez en cuando seguían llamándolo para pedirle algún consejo, “las personas quieren sentirse a gusto, sentir que están contribuyendo a un objetivo común. Vale la pena dedicar tiempo a comunicar los planes, diseñarlos juntos y reconocer el papel de cada persona en el conjunto. Corregir desvíos, o actitudes egoístas también es labor del líder humanista, por el bien del proyecto y de la persona”.

De 2021 esperamos una profunda digitalización de la empresa, capacidad de innovación, liderazgo y trabajo en remoto. Pero especialmente, equilibrio, bienestar, apertura mental. Y mucho esfuerzo personal.

La experiencia en otras crisis ha demostrado que se tarda meses e incluso años en salir de la desilusión y la pesadumbre que acostumbran a seguirles. Por tanto, son bienvenidas todas las fórmulas que aporten energía: ¡optimismo, optimismo! Nos gusta más escuchar cómo puede ir todo mejor que nos expliquen los peligros que nos rodean.

En Cataliza sabemos que la fuerza del equipo y la misión de la organización hacen la diferencia. Confiamos en que seremos capaces, ya hemos superado muchos retos. ¿Te apuntas?